El presidente Petro convocó a un gran acuerdo nacional

“Es el momento de un acuerdo nacional. Cuando uno pronuncia estas palabras se sabe que todos estamos de acuerdo, que suena bonito. El diálogo nacional que debe ser seguido de un acuerdo nacional y ya tuvimos una experiencia histórica: la constituyente del 91”. Con esa intervención, el presidente Gustavo Petro pidió lograr un gran espacio de concertación entre todas las fuerzas sociales y políticas.

Durante su discurso de instalación del Congreso de la República, el jefe de Estado se centró en dos bloques: la justicia ambiental y social; en este último habló de la Paz Total, los avances en la implementación de la Reforma Rural Integral (primer punto del Acuerdo Final de Paz) y la lucha contra las drogas, sobre todo el fentanilo.

Al finalizar su oratoria, que duró más de hora y media, hizo un llamado al Congreso en pleno para conformar un acuerdo nacional entre las diversas fuerzas sociales para avanzar en la pacificación nacional y la eliminación de confrontaciones política. Sobre esto, indicó que esa iniciativa debe tener como primer objetivo la construcción de sociedades más equitativas.

“Yo creo que un acuerdo nacional versa alrededor de tener una sociedad más justa y más productiva y que es el camino de la paz (…) Podemos hacerlo en medio de las diferencias y las diversidades sociales, económicas y políticas”, explicó Petro. De paso, extendió una invitación a “quienes han dirigido el país” a ceder para llegar a consensos.

“Es el momento de ceder para construir un país más equitativo en el mundo laboral y productivo”, agregó Petro.

En ese sentido, insistió que ese acuerdo nacional no puede enfocarse en que “ceda el pobre” sino que esa debe ser la tarea de los que han manejado el país y concentran el poder para beneficio de, según él, la población excluida.

Para ello, añadió que “no es con retórica” que se logra ese acuerdo, sino con mejores condiciones en el sistema actual de salud y educación; por lo que sugirió la aprobación de las grandes reformas que se discutirán en el Congreso (salud, pensional, laboral y a la Ley 30).

El presidente, a modo de conclusión, volvió a decir que ese mecanismo pasa también por el Legislativo: “El Congreso de la República es la expresión más condensada del acuerdo nacional que se tramita aquí a través de la ley y de la reforma que tiene que ver sobre salud, el mundo laboral y las pensiones”.

Sumado a eso, indicó que las nuevas discusiones también deben abarcar los servicios públicos, cuyos proyectos de ley serán presentados en la primera legislatura correspondiente al Gobierno Petro.

Al cierre, sostuvo que ese acuerdo nacional debe ser una de las bases de la paz a fin de terminar con la “segunda fase” de la violencia en Colombia: la perpetrada entre la insurgencia y el Estado. Al respecto, mencionó que esa confrontación ha terminado, así como los conflictos partidistas similares a los vividos en la época de La Violencia.

“Este acuerdo nacional de justicia social y ambiental puede condensarse en el Congreso de la República alrededor de las reformas que Colombia necesita. Colombia potencia mundial de la vida es eso”. Posteriormente, Petro anunció oficialmente la instalación del Congreso colombiano en un nuevo periodo legislativo.

Una vez finalizó su discurso, el turno de hablar fue para la oposición. La primera en intervenir fue la senadora María Fernanda Cabal, del Centro Democrático. Empezó con una dura crítica a la situación de seguridad del país. Erika Sánchez, del mismo partido, también entregó un discurso dentro del estatuto de oposición.

David Luna, de Cambio Radical, y Daniel Carvalho, de Verde Oxígeno (también opositores), culminaron la réplica al discurso del presidente.

Infobae