«Me dejé llevar por la rabia y el trago»: Armando Benedetti tras audios filtrados

Pese a que en los audios filtrados en la noche del domingo 4 de junio el exembajador en Venezuela Armando Benedetti dijo que no estaba borracho, en un nuevo pronunciamiento confesó que al momento de tener esa conversación con Laura Sarabia sí estaba bajo los efectos del alcohol.

Así lo reconoció en un trino publicado en la tarde del lunes 5 de junio. Horas después de asegurar que las denuncias y señalamientos en su contra hacían parte de una “campaña de desprestigio” el también exsenador publicó un nuevo trino en el que, otra vez, volvió a reconocer su error ante lo conocido en las grabaciones publicadas por Semana.

En su nuevo mensaje, Benedetti afirmó que sí fue parte importante en la campaña del hoy presidente Gustavo Petro y de su actual proyecto político; sin embargo, confesó que cometió una nueva equivocación al hacer señalamientos contra el jefe de Estado, la propia Sarabia y varios ministros y exfuncionarios de la actual administración, como Luis Fernando Velasco y Alfonso Prada.

“He sido parte fundamental del actual proyecto político del presidente Petro. Sin embargo, no satisfecho con lo que me correspondió políticamente, en un acto de debilidad y tristeza me dejé llevar por la rabia y el trago”, aseguró Benedetti, que justamente, eliminó el trino en el que aseguró que había una campaña “contra mi integridad personal”.

Minutos después del controversial trino del también excongresista, el jefe de Estado compartió una captura de pantalla de esa publicación, reiteró que no hay evidencia sobre una posible comisión de delitos por su parte, pese a que varias figuras políticas interpusieron demandas penales ante la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes por irregularidades en el camino rumbo a la Casa de Nariño.

“Nuestros rivales políticos se han apresurado a ponerme denuncias en la comisión de acusaciones. Sin embargo en ninģuna entrevista o en audios se ha mostrado que he cometido un delito”, señaló Petro. Por otra parte, volvió a mencionar el “golpe blando” que según él se estaría fraguando contra el actual Gobierno “para detener la lucha contra la impunidad”, haciendo relación a la elección de la terna para escoger al nuevo fiscal General de la Nación.

La primera vez que el mandatario usó ese término fue a finales de mayo, al momento de referirse a decisiones administrativas que le quitaron al Pacto Histórico la presidencia del Congreso. Concretamente, hizo referencia al fallo de nulidad proferido por el Consejo de Estado contra la elección de Roy Barreras como congresista.

Ante esa advertencia, el alto tribunal llamó la atención del presidente y pidió respetar la autonomía judicial y las decisiones que allí se tomen. “El Consejo de Estado debe señalar que no considera que las expresiones del primer mandatario guarden relación con sus decisiones, pues la Corporación no ha emitido órdenes administrativas con los efectos que él señala”, aseguró en un pronunciamiento emitido el 29 de ese mes.