Presidente Petro pidió investigar robo millonario a Ecopetrol

Foto: Colprensa

Varias firmas fueron señaladas de hacer parte de todo un entramado para robar miles de galones de crudo del oleoducto Caño Limón-Coveñas, perteneciente a Ecopetrol, y hacer ver esa operación como legal. Ya las autoridades incautaron millonarios bienes a reputados empresarios presuntamente involucrados en el ilícito y hasta el presidente Gustavo Petro pidió investigar más a fondo el asunto.

Ahora se avecina una fuerte batalla legal entre las autoridades colombianas y los equipos de abogados de las empresas comprometidas. Y no es para menos, ya que estas compañías se encuentran bajo investigación en un caso transnacional que involucra dos procesos judiciales en Colombia: uno de carácter penal y otro de extinción de dominio, notificado el pasado 18 de mayo.

Una de las empresas investigadas es Australian Bunker, propietaria de un buque que según las autoridades era utilizado para movilizar el crudo extraído ilegalmente. Sus apoderados se pronunciaron a través de su representante legal, el abogado William Soto, que entregó detalles de la embarcación y el proceso que afronta la compañía en los estrados.

Para empezar, aseguró que aquella empresa compró el buque hace dos años, pero que estaba tan deteriorado que tuvo que ser remolcado desde Panamá y que actualmente está atracado en la costa de Cartagena porque su motor no sirve. “Esto desmiente la versión de la Policía que dice que el buque era utilizado para transportar el crudo ilegal”, dijo el abogado.

Señaló también que la embarcación ni siquiera cuenta con matrícula ni permisos para poderse movilizar. “Sí, reconocemos que Australian Bunker está en un proceso con la Fiscalía, pero el buque no hace parte de la extinción de dominio”, manifestó.

Respecto a los señalamientos de que esa compañía hizo parte de todo el entramado para robar crudo de Ecopetrol, el abogado aseguró que en juicio demostrarán que no fue así, sino que ellos fueron víctimas de terceros.

Así mismo, indicó que cuenta con toda la documentación necesaria para demostrar que las adquisiciones de un diluyente por el cual las autoridades están relacionando a la compañía con el entramado de tráfico de hidrocarburos se hizo de manera legal, y recalcó que Australian Bunker no es responsable por las actividades ilegales en las que hayan incurrido sus proveedores.

“Nosotros somos unos terceros de buena fe, nosotros tenemos toda la documentación, tenemos todas las explicaciones habidas y por haber para demostrarle a la Fiscalía cómo nosotros cumplimos con todo lo legal, cómo sí teníamos todos los controles, pero llegar a decir que el buque fue utilizado para transportar crudo, eso no le cabe en la cabeza a nadie, se lo puedo asegurar con un cristo en la mano”, expresó el abogado de la empresa.

Así es el barco presuntamente utilizado para transportar el crudo robado a Ecopetrol

El buque tiene capacidad para transportar más de 1.400 toneladas, diez tanques de lastre, dos cuartos de máquinas y diez tanques de carga. Está valorado en aproximadamente cuatro millones de dólares (16.000 millones de pesos), según le revelaron fuentes de la Policía a la Revista Semana.

Actualmente, está en poder de la Sociedad de Activos Especiales (SAE), luego de caer en la megaoperación de la Dijín contra el tráfico ilegal de hidrocarburos.

De acuerdo con la investigación, los traficantes de hidrocarburos y las empresas presuntamente involucradas le compraban el crudo al ELN, que lo extraía del oleoducto mediante la técnica del baracheo (instalar válvulas de extracción). De esta forma movían 80.000 galones diarios que les representaban ganancias por 150.000 dólares por día.

Ese crudo era presuntamente transportado al buque para que se lo llevara a otras embarcaciones a altamar. Luego, era almacenado en refinerías de Centroamérica para ser enviado a Europa para posteriormente devolverlo a Colombia, donde irónicamente lo compraba Ecopetrol.

Para darle apariencia de legalidad a la operación, el crudo era sometido a diferentes tratamientos para revenderlo a empresas legalmente constituidas, luego llevado a plantas de tratamiento y finalmente vendido a Ecopetrol y otras empresas internacionales.

Infobae